sevilla
sevilla

Los trabajos de restauración de Santa María la Blanca en Sevilla descubren los restos de la antigua sinagoga

El desmontaje del altar mayor ha permitido acceder a parte del muro trasero de la antigua sinagoga, "en un muy precario estado de conservación". 

CANAL SUR MEDIA 30 abril 2024

La intervención en el ábside y el retablo mayor de la iglesia de Santa María la Blanca, ubicada junto a la Puerta de la Carne de Sevilla, --en la calle del mismo nombre--, y que se llevan a cabo en este templo desde el pasado mes de noviembre, han dejado al descubierto restos de la antigua sinagoga; en concreto, parte del muro trasero, oculto por el retablo mayor, "en un muy precario estado de conservación" por la naturaleza de los sistemas constructivos originales "y de su falta de conservación en estos más de 350 años".

Así lo constatan los responsables de estos trabajos de restauración en ambos espacios, con el arquitecto José María Rincón como director de obra y el seguimiento arqueológico de José Antonio Valiente. En este sentido, ha sido necesario desmontar el retablo mayor, de Martín Moreno, "pieza a pieza" para poder intervenir en la trasera del edificio, según han destacado en el acto de presentación a los medios de esos hallazgos.

El templo se configuró como mezquita de barrio de reducidas dimensiones y se mantuvo así hasta 1248, con la conquista de la ciudad, momento en el que pasó a ser sinagoga. En el siglo XIV se produjo una remodelación y se colocaron las bancadas para acoger a los fieles en el rezo. "De este modo, se anuló el muro de Quibla y se colocó el hejal, que es el espacio donde se guardan los libros sagrados de la Torá y los elementos litúrgicos necesarios, en unas hornacinas, según la tradición ortodoxa judía".

"El muro derecho perpendicular fue recortado unos 30cm, en la trasformación en iglesia, para la colocación de las escaleras de acceso a la trasera del altar mayor. De esta manera, el hejal pasó a ser presbiterio y a colocarse en él la mesa de altar". Al respecto, los técnicos creen que en ese momento "también se eliminó toda la decoración que el hejal debió tener y que no nos ha llegado a nuestros días".

Este desmontaje necesario del retablo mayor "nos permite disfrutar ahora de un panorama de una zona de la iglesia que sólo estará visible durante unos meses". "Sabíamos que estábamos trabajando en un espacio en el que los principales historiadores que han estudiado el edificio en los últimos años --Oscar Gil, Teodoro Falcón y Rafael Gómez-- situaban el límite trasero de la sinagoga".

La iglesia se convirtió en templo cristiano a partir de 1391 y siguió transformándose hasta la segunda mitad del siglo XVII, cuando se produce "la gran transformación barroca" del mismo, comandada por el canónigo Justino de Neve, momento del que procede la configuración actual de la capilla mayor o presbiterio de la iglesia.

ES NOTICIA